OBRA DE JAVIER ASTORGA EN CHINA

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Con más de treinta años de ejercer profesionalmente su vocación artística, íntimamente ligada a raíces nacionales, que se remontan a expresiones tridimensionales de la Mesoamérica ancestral, la obra del destacado escultor y arquitecto mexicano Javier Astorga, egresado de la Universidad Iberoamericana, ha sido adquirida por coleccionistas y gobiernos de diversos países, entre otros: España, Francia, Suecia, Noruega, Emiratos Árabes Unidos, Taiwán, Estados Unidos, Burkina Faso (África Occidental),Canadá, Argentina, Bolivia, Holanda y Brasil.

 

Otra vertiente, más propiamente pedagógica de su labor, han sido las múltiples conferencias que ha dictado en universidades y casas de estudio de México y otros países, siendo una de las últimas la que ofreció, en agosto del 2013, dentro del marco de la Biennal de Talla de Piedra Marc la Tour, en la ciudad de Correze, Francia, titulada “L'art Mesoamericain et son influence dans l’art contemporain”.

Este todavía joven valor de la plástica latinoamericana (nació en la Ciudad de México en abril de 1964). También ha tenido el arrojo y valentía de incursionar en territorios asiáticos poco  frecuentados por nuestros artistas.

En China se exponen obras suyas desde hace tiempo, muchas de las cuales han sido premiadas en concursos donde han competido notables artistas internacionales y de aquellas localidades.

Tal es el caso del Premio Internacional de Escultura Wuhu Liu Kaiqu, que en su cuarta edición se llevó a cabo en la ciudad de la China meridional de Wuhu, donde nuestro autor presentó una obra reciente, con la que fue finalista de esta justa, siendo el único representante del continente americano.

 

Durante los anteriores tres años en que se han llevado a cabo estos eventos, ubicados en el Parque de Escultura Wuhu, donde actualmente se exhiben 147 obras de autores de diversas nacionalidades, ha fincado un prestigio indiscutible que es, cual lo define la publicación de su convocatoria:

“Como el premio académico más distinguido en el campo de la escultura China. El establecimiento del Premio Liu Kauiqu se efectúa para mejorar la calidad creativa y el incremento en la apreciación del arte público y la escultura urbana, así como para animar y honrar los logros fuera de serie y promover la investigación académica, la práctica y desarrollo de la escultura e impulsar su valía y comunicación.”

 

De la misma fuente documental, transcribamos la cita en que se enfatiza su inclinación por la fusión de las humanidades y el retomo a la naturaleza con respecto a su entorno ecológico.

 

“La exhibición Wuhu 2014 invita a los escultores a adoptar un nuevo pensamiento al crear sus obras y buscar nuevas posibilidades en el desarrollo artístico al aplicar nuevos conceptos de arte que combinen las humanidades con la naturaleza. Se busca -con todos los esfuerzos posibles-  crear un nuevo horizonte de la escultura de paisaje.”

Fundamentado en los principios de apertura, limpieza y justicia, el comité organizador ha reunido un jurado que planea construir 35 obras finalistas para su exhibición a la intemperie, las cuales serán coleccionadas por el Gobierno Municipal de la ciudad de Wuhu.

Las esculturas elegidas han sido presentadas en formato de maqueta y mostradas por su creador en persona. Su manufactura en gran formato (mínimo cuatro metros de altura) será producida en una fábrica local designada por el citado comité, donde el artista deberá supervisar el proceso de elaboración, que se llevará a cabo entre los meses de septiembre, octubre y mediados de noviembre del presente año de 2014.

“Dance of Flowers and the Sun” (Danza de Flores y el Sol), es el título que eligió el maestro Javier Astorga para la pieza con que incluye su presencia en esta competencia artística.

No cabe la menor duda que esta creación tridimensional tiene reales posibilidades de merecer un premio por su excelencia en el imaginativo diseño e impecable factura, tanto como por sus formas que recuerdan flameantes alas sutiles de una flor de erguida eclosión, las cuales insólitamente presentan volátiles pétalos multicolores de fototropismo cenital. Pero quién mejor que el maestro Astorga para explicar la intención artística de la misma:

"Se erige a partir de unidades plásticas que "levitan" a medida que la obra crece y se vincula entre sí, abriéndose al aire y al diálogo perpetuo entre vacío y sólido (...)" El sol baila en la cresta de la obra como un fuego de artificio que gira, tocando apenas las formas vegetales, compartiendo su calor en búsqueda de la estabilidad.

 

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Lily Kassner

Verano del 2014.

 

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